EN LAS OSCURAS NOCHES EL MAR SE OYE.
EN LAS SONORAS OLAS, TU VOZ AUSENTE.
Regresan cual aire al recuerdo
Tus golpes de ola, tu aguda voz,
El poison de tus ojos de hielo.
Se divisa tu silueta en las estrellas.
Huiste de mis oídos, de mi pecho,
Y aún creas constelaciones en el cielo,
Y a todo lo que existe te asemejas.
Camina con el aire! Disuélvete en el éter!
Mira hacia atrás, si acaso, una vez sola.
No vuelvas ni a mi alma, ni a mi pecho, ni a mi mente.
En los oscuros pinos se desenreda el viento.
Cantamos a compás la balada de la muerte.
Todo es ausencia y silencio cuando algo se pierde
Y todo se hace presente cuando algo se ha muerto.